La transparencia y el cumplimiento normativo son pilares para el éxito, es fundamental que conozcas conceptos clave que impactan directamente en la operación de tu negocio. Uno de ellos, cada vez más relevante, es el de la Persona Políticamente Expuesta (PEP).
Quizás ya te sea familiar, o tal vez sea un término nuevo para ti. En cualquier caso, comprender a fondo qué implica ser una PEP y cómo esta definición se relaciona con tu empresa es esencial para operar de forma segura, ética y conforme a las regulaciones vigentes en México. Aquí te lo explicamos de manera clara y directa.
Una Persona Políticamente Expuesta se refiere a un individuo que, debido a su posición, influencia en el ámbito público, o por sus vínculos cercanos con alguien que ostenta un cargo de este tipo, es considerada de mayor riesgo en lo que respecta a actividades como el lavado de dinero o la corrupción.
Formalmente, una PEP es aquella persona que desempeña o ha desempeñado funciones públicas destacadas, ya sea a nivel nacional, en un país extranjero, o en una organización internacional. Es crucial entender que esta categoría no solo abarca al funcionario público en sí, sino que se extiende a sus familiares directos y a sus colaboradores o asociados cercanos.
Para mayor claridad, estos son algunos ejemplos de quiénes pueden ser clasificados como PEP:
Es importante subrayar que ser una PEP no implica una presunción de culpabilidad o de involucramiento en actividades ilícitas. Simplemente indica que su posición de poder o influencia requiere una debida diligencia intensificada por parte de las entidades reguladas, dada la naturaleza de los riesgos asociados a dichas posiciones.
La relevancia de identificar a las PEP para tu negocio radica en la prevención de operaciones con recursos de procedencia ilícita y el financiamiento al terrorismo (PLD/FT).
En México, la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita (LFPIORPI), conocida como la "Ley Antilavado", establece obligaciones específicas para diversos sectores.
Si tu empresa lleva a cabo alguna de las Actividades Vulnerables señaladas en esta Ley (por ejemplo, compraventa de inmuebles, vehículos, metales preciosos; servicios de arrendamiento de inmuebles, de mutuo o préstamo; blindaje de vehículos; servicios profesionales independientes; etc.), tienes la obligación legal de:
Incluso si tu negocio no realiza actividades vulnerables, una interacción sin la debida precaución con una PEP podría exponerlo a riesgos reputacionales, operativos y financieros significativos.
La falta de conocimiento y de una gestión adecuada de las relaciones con PEP puede tener consecuencias importantes para la estabilidad y el crecimiento de tu negocio:
Consecuencias Negativas (Al Ignorar la Identificación de PEP):
Beneficios de una Gestión Proactiva de PEP (Al Entender y Aplicar los Controles):
La identificación de una PEP es un proceso que requiere diligencia y el uso de fuentes confiables:
Una vez que identificas a un cliente como PEP, la evaluación no es solo "sí o no", sino que implica una debida diligencia intensificada.
Aunque existen múltiples recursos para identificar a una PEP, hacerlo manualmente puede ser costoso, lento y propenso a errores. ekatena es una herramienta que automatiza la detección de Personas Políticamente Expuestas mediante el cruce de datos públicos, listas oficiales y fuentes especializadas, lo que permite a las empresas tomar decisiones más informadas y rápidas.
Sin necesidad de ser un experto en cumplimiento, puedes integrar este tipo de tecnología a tus flujos de trabajo y reducir significativamente el riesgo operativo y reputacional asociado a no identificar correctamente a una PEP.
Puedes conocer más sobre nuestra solución haciendo clic aquí.
Si tu cliente es una PEP, puedes seguir adelante con la relación comercial, pero bajo un marco de mayor cautela:
Comprender y gestionar el concepto de Persona Políticamente Expuesta es más que una simple obligación legal; es una estrategia inteligente para la sostenibilidad y el crecimiento de tu negocio.
Ser proactivo en la identificación y mitigación de estos riesgos te permitirá construir una empresa más transparente, ética y, en última instancia, más exitosa.
No dejes la protección de tu negocio al azar. Invierte en conocimiento, procesos y, si es necesario, en herramientas especializadas. La prevención es la clave para asegurar tu tranquilidad y el futuro de tu empresa.